Rusia retira a un cosmonauta de misión de SpaceX por presunto espionaje tecnológico
Mosaico
La misión Crew-12 de SpaceX, prevista para despegar el 15 de febrero hacia la Estación Espacial Internacional (EEI), enfrenta un giro inesperado. El veterano cosmonauta ruso Oleg Artémiev, uno de los perfiles más experimentados de Roscosmos, fue retirado del equipo a dos meses del lanzamiento, en medio de un hermetismo que reaviva tensiones entre Moscú y Washington.
Roscosmos anunció que Artémiev será reemplazado por Andréi Fediayev, justificando la decisión con una escueta referencia a su “traslado a otro puesto”. Sin embargo, fuentes del sector espacial ruso apuntan a un posible incidente de carácter sensible dentro de las instalaciones de SpaceX en Hawthorne, California.
De acuerdo con el analista Gueorgui Trishkin, Artémiev habría vulnerado regulaciones del régimen estadounidense ITAR —que controla la exportación de tecnología considerada de uso militar— al fotografiar documentación y componentes restringidos, incluidos presuntos motores de la compañía. La información habría sido extraída en su teléfono móvil durante sesiones de entrenamiento para volar en la cápsula Dragon.
La presunta infracción abrió la puerta a una investigación conjunta entre las agencias que participan en Crew-12, que buscan determinar si las acciones del cosmonauta fueron deliberadas o producto de un descuido. Artémiev acumula tres misiones a la EEI, más de 560 días en órbita y ostenta el título de Héroe de Rusia, además de ocupar un escaño regional por el partido oficialista Rusia Unida.
Golpes simultáneos al programa espacial ruso
La salida de Artémiev coincide con otro contratiempo relevante para Roscosmos. El cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, sufrió daños en su Área 31 tras el lanzamiento de la Soyuz MS-28. Restos de una cabina de servicio cayeron al foso como consecuencia de un cierre defectuoso, quedando destruidos tras el encendido del cohete.
La agencia rusa confirmó afectaciones en varios componentes de la plataforma y aseguró que cuenta con repuestos para completar las reparaciones en el corto plazo. Sin embargo, persisten dudas entre especialistas sobre la capacidad de Baikonur para sostener el calendario de lanzamientos, especialmente cuando SpaceX avanza en consolidar su papel como proveedor dominante de transporte tripulado hacia la EEI.
El Área 31 es el único punto de lanzamiento disponible para los modelos más recientes de la nave Soyuz, lo que añade presión a la misión de reabastecimiento Progress prevista para el 19 de diciembre. Mientras Roscosmos mantiene un discurso de normalidad, la comunidad espacial rusa se mantiene dividida respecto a los tiempos reales de recuperación.
Fuente: El País

