Colombia
El secretario general del Senado, Diego Alejandro González, confirmó la validez jurídica de la votación celebrada el pasado 14 de mayo en la que la plenaria negó la solicitud del Gobierno nacional de convocar una consulta popular de carácter nacional. A través de un documento oficial, González detalló el procedimiento seguido y reafirmó que se ajustó plenamente a las normas que regulan el funcionamiento del Congreso.
“El Senado no votó ninguna proposición porque nunca existió una. La solicitud presentada por el Gobierno no constituye una proposición formal y, por ende, no fue objeto de votación bajo ese carácter”, precisó González. Aclaró que lo sometido a la consideración del Senado fue una solicitud de concepto favorable, tal como lo establece el artículo 104 de la Constitución Política.
La iniciativa del Ejecutivo fue negada por la plenaria con una votación de 49 votos en contra y 47 a favor, resultado que, según el secretario, quedó debidamente certificado por su despacho el mismo día de la sesión.
González subrayó que el trámite cumplió con el principio de publicidad y transparencia, contando con amplia deliberación y participación de todos los sectores políticos representados en el Senado, incluidos los ministros del gabinete y las distintas bancadas legislativas.
“El documento del Gobierno no era un proyecto de ley, sino una herramienta de participación democrática que requería del concepto del Senado. En ese sentido, el procedimiento fue tramitado conforme a la Constitución y el reglamento interno del Congreso”, explicó.
La postura del secretario cobra relevancia en momentos en que el Gobierno insiste en repetir la votación. No obstante, el presidente del Senado, Efraín Cepeda, ha reiterado que la solicitud ya fue debidamente evaluada y rechazada por la plenaria, descartando así su reconsideración.
La votación del 14 de mayo marcó un punto de quiebre en la estrategia del Ejecutivo, que buscaba legitimar por vía popular su propuesta de reforma a la salud. Con la negativa del Senado, se fortalece la posición del Legislativo como contrapeso institucional en el actual escenario político.
Fuente: Semana
