El diputado Carlos Núñez Salinas confirmó su renuncia a Honor Colorado para reincorporarse a Fuerza Republicana, partido político liderado por Hugo Velázquez, con el propósito de fortalecer la bancada en ambas cámaras del Congreso. Este movimiento se da en un contexto en que Velázquez avanza en la consolidación de su equipo de cara a una posible postulación presidencial para 2028.
Paralelamente, tras la reciente resolución del Tribunal Electoral Partidario (TEP), este lunes inició el proceso de inscripción de movimientos internos dentro de la Asociación Nacional Republicana (ANR). Esta etapa es previa a la elaboración del padrón electoral que se empleará en las elecciones municipales de 2026.
Fuerza Republicana y Añetete fueron los primeros en formalizar sus denominaciones ante el TEP. En este marco, Núñez Salinas oficializó su regreso a la disidencia, acompañado por figuras como Hugo Ramírez y Juan Villalba, ambos precandidatos a la intendencia de Asunción. El legislador por Central criticó la falta de renovación en el gabinete y calificó al partido oficialista de “poco empático con las necesidades de la dirigencia”.
La decisión de Núñez Salinas ocurre en medio de una reestructuración del equipo oficialista en Central, liderado por el ministro de Desarrollo Social, Tadeo Rojas, y el intendente de Luque, Carlos Echeverría. A pesar de haber sido uno de los congresistas con mayor respaldo electoral en la región, Núñez Salinas no fue convocado a integrarse a esta nueva etapa, situación que motivó su alejamiento para contribuir a la consolidación de Fuerza Republicana y la disidencia en el Parlamento.
En el plano interno, las bases del partido Colorado anticipan la proliferación de aproximadamente un centenar de movimientos independientes, reflejo del descontento hacia la cúpula cartista. Este grupo, pese a su triunfo en las elecciones generales de 2023, mantiene una postura que ha generado distancia con la dirigencia territorial.
Un convencional del departamento de Central, en diálogo con LPO, manifestó: “La dirigencia puede estar callada, pero la aparición de nuevos movimientos es una clara señal de rebelión. Hay un cansancio palpable que se evidenciará en las candidaturas de la disidencia. La meta es renovar la estructura que actualmente dirige el partido”.
Horas después de la inscripción formal de Fuerza Republicana y la reincorporación de Núñez Salinas, la exministra de Justicia Cecilia Pérez encabezó la presentación de la documentación legal correspondiente a Añetete, movimiento liderado por el expresidente Mario Abdo Benítez, reafirmando así la dinámica interna de los grupos disidentes.
Fuente: La Política Online
